Sólo la comunidad organizada puede generar un mejor modo de vivir
En la España peninsular no hubo «conflictos inter-religiosos» en la historia contemporánea, ni siquiera comunidades judías numerosas. Y sin embargo el antisemitismo ha sido y es moneda corriente, invisible por omnipresente, a lo largo de toda la vida de las generaciones presentes. ¿Por qué? ¿Cómo lo enfrentamos?
Si se quiere evitar que la tensión campo-ciudad acabe en toda Europa en una fractura geográfica y generacional insalvable, hace falta un giro del discurso público hacia el universalismo acompañado de acciones colectivas que le den materialidad, haciendo de la repoblación y la industrialización sostenible, digital y, a ser posible, cooperativa del campo -el único nicho posible hoy-, un objetivo colectivo creíble.
Cuando luchamos triunfamos todos porque luchar juntos nos hace mejores a cada uno.
¿Qué define a los maximalistas? Hay cosas que se ven de lejos, otras que se entrevén y otras que no suelen apreciarse, pero sobre todo hay unos fundamentos que definen como somos y queremos ser.
El desprecio por el conocimiento se ha convertido en norma social y puede afirmarse orgullosa e impunemente en reuniones de «expertos», presentaciones de trabajo e incluso en ensayos. ¿Cómo se ha llegado hasta aquí?
Aceptémoslo, no hay forma de salvar la pequeña propiedad. Todo lo que cabe esperar en ese sentido son paños calientes y una agonía más larga. La pequeña propiedad no puede ser indefinidamente el dique que contenga la desolación y la despoblación rural.
Cuando en una sociedad los delirios ocupan el lugar de las utopías es que ya no hay lugar ni para el sueño ni para la pesadilla. Es el momento del hacer más concreto y material, por modesto que sea.
Tenemos que tomarnos en serio la promoción de la lectura profunda y el desarrollo de herramientas vinculadas a ella. Es parte de la demanda de un nuevo modo de vida y no lo es por casualidad; disfrutar del hábito de leer nos hace más fácil ser parte con los demás, nos aleja de la desmoralización general y es fundamental para poder sostener un aprendizaje continuado.
